Cuando aceptaste a Jesús como señor y salvador.
Y lo hiciste el centro de tu vida.
El té limpio de todos tus pecados.
Y te dio potestad para ser llamado hijo de Dios.
Toma esa autoridad y úsala.
Y con esa autoridad echa al enemigo de tu vida.
“Mas todos los que le recibieron,
a los que creen es su nombre,
Les dio potestad de ser llamados hijos de Dios.”
Juan 1:12
ALELUYA