Cuando tomamos la sabia decisión de aceptar a Jesús en nuestro corazón
Y hacerlo a el dueño y señor de nuestra vida.
Ese día pasamos de muerte a vida.
Y desde ese día somos mas que vencedores
Y somos limpiados de todo pecado, enfermedad y pobreza, por la sangre de Jesús
Somos liberados sellados y apartados para Cristo.
“De cierto, de cierto os digo;
el que oye mi palabra
y cree en el que me envió,
Tiene vida eterna;
y no vendrá a condenación,
mas a pasado de muerte a vida”
Juan 5:24
AMEN