Aunque vengan las tribulaciones, tenemos que estar gozosos y alabar a Dios.
Y siempre pero siempre orando, no dejemos nunca de tener comunión con Dios.
Nuestro mayor poder esta en la oración, no lo olvidemos.
Orando se gana batallas y se consiguen grandes victorias.
“Gozosos en la esperanza; sufridos en la tribulación; constantes en la oración”
Romanos 12:12
Amen
