Él mundo nos trae tribulaciones y
distracciones.
Por eso tenemos que fijar nuestros ojos
en Jesús el autor y consumador de la Fe.
No le digas a Dios cuán grande es tu
problema.
Dile al problema cuán Grande es tu Dios.
“No mirando nosotros las cosas que se
ven,
Sino las que no se ven;
Pues las cosas que se ven son temporales,
Pero las que no se ven son eternas.”
2 Corintios 4:18
AMEN