Tenemos un gran honor de tener como Padre a Dios y que él envió a su único hijo unigénito a morir por nosotros para que nosotros fuéramos salvos lo izo por el amor hacia nosotros. Y sabemos que Jesús al morir en esa cruz nos libero de nuestros pecados y cargo con todas nuestras enfermedades.
Como nos dice en:
Isaías 53:5
“Mas el herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, Y por sus llagas fuimos nosotros curados.”
AMEN
